Desastres de Hollywood: The Walking Dead "Cómo arruinar lo perfecto" Parte 2

 

Seguimos con la historia de la decadencia y muerte del show. Dejo aquí el link con la primera parte por si alguien se lo perdió. Ahora nos toca sufrir a lo grande.

Al estrenar la quinta temporada, “The Walking Dead” seguía siendo el show más visto del planeta. Pero el elenco ahora tenía tantos personajes, que la sensación de que los protagonistas principales podían morir, en cualquier episodio, se perdió para siempre. Las muertes quedaron ahora reservadas solo para los personajes sin importancia, que la gente detestaba, porque eran los que aparecían en los episodios de relleno de la narración circular. El público amaba tanto al show que aún podía soportar los capítulos aburridos (y sin historia) utilizados para estirar más el chicle. Fue entonces que los guionistas decidieron repetir por cuarta vez la trama ya gastada de:


Buscar un hogar - Verlo destruido por una catástrofe - Buscar otro hogar.


Sucedió con:


-La granja de la familia Greene en la segunda temporada.

-La prisión abandonada en la tercera temporada.

-Terminus en la cuarta temporada.

-El pueblo de Alexandria en la quinta temporada.

 

 

The_Walking_Dead_Negan_Lucille

Negan Smith de pie con "Lucille" al hombro.


La quinta temporada es nefasta además por la pérdida de tiempo que muchos recordamos como “la muerte de Beth” y que aún tiene hablando a las personas al día de hoy. Beth Greene, la hija menor de Hershel y hermana de Maggie, era mi personaje preferido de toda la serie. Ella servía como nexo entre otros miembros del grupo de Rick, brindando la parte positiva gracias a su visión de la vida. Era también la responsable de “ablandar” al personaje de Daryl Dixon. El balance que existía entre ambos era genial de ver en pantalla. Si Daryl era la noche; Beth era el sol del amanecer, funcionando juntos a la perfección. El episodio donde Beth decide cantar para elevar la moral del grupo dentro de la prisión abandonada, es uno de los pocos momentos bellos del show. Desde la segunda temporada ella fue creciendo (en importancia y desarrollo) solo para ser secuestrada por una agrupación rival durante la segunda mitad de la temporada cuatro. Rick y su grupo buscan entonces a Beth hasta dar con ella en la base de los enemigos, que era un hospital donde la tenían trabajando de enfermera-esclava. Todo esto ocupó la mitad de los episodios de la temporada cinco. Y cuando la hallan…, Beth muere a manos de la líder del grupo de médicos-policías. Esta tomadura de pelo con forma de guion puso furiosa a la audiencia del show. Lo más vergonzoso fue que dejaron de lado su muerte, para continuar con la narración circular, como si fuese lo más normal del mundo. Fue el primer gran insulto, pero no el último. 

 

Beth_Greene_The_Walking_Dead

Beth Greene

 

Daryl_&_Beth_The_Walking_Dead

Daryl junto a Beth forman una de las mejores duplas del show.


Beth_Greene_Death_Season_5
La muerte de Beth.


Las temporadas cinco y seis fueron también las de las “conveniencias de guion” o los “Deus ex machina” que siempre avanzaban la trama a favor de Rick Grimes de las formas más ridículas posibles:

-¿Van a enjuiciar y expulsar a Rick de la comunidad de Alexandria por ser un demente? No importa, porque justo aparece un zombie de la nada, y Rick tiene que salvar a la gente en medio del juicio usando su cuchillo.

-¿Las personas en Alexandria vivieron siempre en paz sin toparse con los zombies? No importa, porque justo llega una horda enorme de ellos. Rick y los suyos los combaten para salvar al pueblo entero.  

¿El matrimonio a cargo de Alexandria no se decide si aceptar o no el uso de armas por parte de Rick y su grupo? No importa, porque justo enloquece un vecino de la comunidad, para asesinar al esposo de la líder del pueblo. Entonces ella le pide a Rick que lo mate a balazos en venganza.

¿Rick Grimes acaba de encontrar al nuevo amor de su vida? ¿Va a quedarse a vivir en Alexandria con ella para siempre? No importa y no importa. Porque justo la mujer muere de la forma más pendeja posible entre una nueva horda de zombies.

 

Rick_Grimes_Alexandria

 Rick Grimes en Alexandria durante la quinta temporada. ¿Recuerdan la caída en la locura de Shane en la temporada 2? Presagio. 


Alexandria_Rick_Grimes_Season_5

Sus enfrentamientos con la líder de Alexandria son otra pérdida de tiempo para el público del show.


Rick´s_Girlfriend_Season_5

La novia de Rick se cansó de vivir y ya.


Con la sexta temporada, el ciclo de un episodio bueno por tres de insoportable relleno comenzó a afectar a los que veíamos la serie. Los personajes nuevos seguían llegando, para no aportar nada a la trama, y después morir como si nada. Fue en este punto, en el episodio número tres de la temporada seis, que Scott Gimple entregó el segundo gran insulto a la audiencia. La “falsa muerte de Glenn” marcó un punto de quiebre en “The Walking Dead”, iniciando la primera pérdida masiva de público del show. Al final del episodio tres, Glenn cae junto con un personaje nuevo desde lo alto de un contenedor, hacia una calle infestada de zombies. La cámara lo toma en primer plano gritando en el suelo, mientras los muertos vivientes devoran su cuerpo. La escena termina de forma brusca sin dejar ver nada más. La gente enloqueció por completo, porque ahora tendrían que esperar una semana para saber qué sucedió con él. Luego de siete días, encendieron la televisión y… vieron un episodio con un personaje diferente, haciendo cosas diferentes, en un lugar diferente. A la semana siguiente, sucedió exactamente lo mismo. A la tercera semana..., también. Gracias a la “narración boomerang”, los que veíamos el show por entonces tuvimos que esperar un mes entero para saber si Glenn había muerto en verdad. Como era de esperar, se trataba del cuerpo de su compañero el que masticaban los zombies. (Lo que no tiene sentido alguno, viendo el ángulo de cámara utilizado o la forma en que lo rodeaban para morderlo.) Glenn regresó a casa sano y salvo. Esa fue una mentira que enfureció a la audiencia en todo el mundo.

 

Scott_M_Gimple_The Walking_Dead

El productor Scott M. Gimple: La M debe de ser por "mentiroso". 


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Glenn (derecha) junto a su compañero antes de caer ambos sobre los zombies.


Glenn_falsa_muerte_temporada_6

A salvo gracias a la magia de la TV. En inglés se llama a esto: "Plot Armor" o "Armadura de Guion".
 

Durante la sexta temporada se mencionaba un nombre en casi todos los episodios; uno que nos mantenía intrigados a más no poder. El nuevo enemigo del show se movía en las sombras, enviando a sus hombres solo para que Rick y los suyos los aniquilaran en respuesta. Parecía otra de tantas batallas ganadas por los protagonistas principales pero… qué equivocados estábamos todos. En el episodio final de la temporada, dando un vuelco inesperado en los eventos, los protagonistas de “The Walking Dead” se ven superados en número por los malos. Obligados a rendirse, son puestos de rodillas en la tierra, mirando hacia una casa rodante o motor home, que mantiene la puerta lateral cerrada. No exagero al decir que nadie en la audiencia estaba preparado para lo que vendría. Detrás de esa puerta emergió “Negan” con su bate de madera envuelto en alambre de púas, apodado "Lucille". Es difícil explicar a quienes no hayan visto el show en esos años, lo terrorífico que resultó el episodio final de esa temporada. El sudor frío en el cuerpo, junto con la sensación de náuseas que sentí en ese momento, son cosas que aún recuerdo al día de hoy.

 

 

Negan_Smith_The_Walking_Dead_S6

Negan Smith...


Negan_Season_6_2016

Sosteniendo a "Lucille".


Con un manejo de ángulo de cámara y una dirección de sonido (e iluminación), pocas veces logrado en la televisión, el episodio número 16 de la sexta temporada es el mejor en toda la historia de “The Walking Dead”. Mediante un monólogo que dura once minutos, el actor Jeffrey Dean Morgan en su papel de “Negan”, explica al grupo de Rick Grimes que va a matar a golpes de bate a uno de ellos, como castigo por lo hecho a sus hombres. Pero no se decide del todo, por lo que realiza un juego de Eenie Mennie Miney Moe, que sería el equivalente para nosotros en Hispanoamérica de De Tín Marín De Do Pingüe, mientras señala con su bate al rostro de cada uno de los protagonistas. La escena es una verdadera tortura para el espectador, que luego de mucho tiempo, vuelve a sentir la tensión de perder a un personaje querido de un momento a otro. Negan sosteniendo en una mano a “Lucille” fue una presentación de personaje brutal para el público. 

 

Negan_escene_Season_6_2016

Comienza el conteo... 


Negan_and_Lucille_Season_6_2016

Y nadie se encuentra a salvo del villano.


Negan_Comic_cover

Negan en la portada del número cien del cómic de Robert Kirkman.

 

Cuando llega el momento de dar el primer golpe con el bate, en el tramo más angustiante del episodio, la cámara cambia a una perspectiva en primera persona de la víctima, y vemos sangre chorreando por toda la pantalla. Gracias a ello desconocemos a quién golpeó el villano. Luego el episodio termina. Esa fue una decisión creativa terrible por parte de Scott Gimple. Recuerden que era el episodio número 16, de un ciclo de 8 y 8, cortesía de los responsables de la serie. El mundo entero supo que ahora tendría que esperar seis meses para saber a quién había asesinado Negan Smith. Fue el punto que inició la caída del show. Ya no podría recuperarse jamás frente a una audiencia que se sentía estafada y tomada por estúpida.

 

Beth_Greene_middle_finger_TWD

 "Muchas gracias x 2, Sr. Gimple."


El episodio inicial de la séptima temporada no es más que una continuación de la clase magistral de filmación que fue el anterior. Negan, fiel a su estilo, no solo mata a golpes a uno sino a dos de los amigos de Rick (siendo Glenn uno de ellos), mientras los tiene arrodillados, llorando frente a él. Negan se muestra más peligroso que en un comienzo al incluir el factor de lo impredecible en su actuar. La forma en que la sangre chorrea desde el bate, o cómo lo agita para salpicar con ella al rostro de Rick, es una de las secuencias más aterradoras en toda la historia de la televisión. El primer episodio de la temporada siete es simplemente alucinante. Y nos hizo creer que vendría algo bueno, a pesar de todo lo malo que hubo que soportar, por parte de Scott Gimple.

 

 

Rick_&_Negan_Season_7

 La interacción entre Rick y Negan es una maravilla.


Negan_&_Rick_Season_7_escene

Pocas veces el público sintió tanto miedo. 

Es difícil en extremo describir lo que sucede con el show a partir del estreno del segundo episodio de la temporada. Pero podría enumerar algunos aspectos que marcan la muerte de la serie, y el punto final de la paciencia, para gran parte de los espectadores. La séptima, junto con la octava temporada también, se consideran al día de hoy como las peores en toda la historia de “The Walking Dead”. Son treinta episodios en los que no sucede nada en absoluto. En un arco argumental que debería de mostrar la batalla a muerte, entre dos líderes sanguinarios como Rick Grimes y Negan Smith, esto es lo que nos entregan a cambio:


-Una caída en calidad del show que es atroz por decir algo. Todo se ve tan barato que no puede creerse cómo lucen los vestuarios o los sets de filmación.


-La cinematografía de los episodios es tan mala que hace que, en comparación, “La Rosa de Guadalupe” parezca dirigida por Alfred Hitchcock.


-La narración circular ya es insoportable, entregando historias que son un insulto a la inteligencia humana.


-Más personajes de relleno cuyas muertes no le importan ni a tu abuela.


-Rick se convierte en un retrasado que no puede diferenciar su zapato derecho del izquierdo.


-Negan pasa de dar miedo, a ser un completo payaso, al que solo le falta visitar hospitales para alegrar a los niños enfermos.


-Daryl Dixon se transforma en un simio que se comunica con gruñidos en lugar de palabras. Y se vuelve irrelevante para la historia a un nivel de risa.


-Como matar al personaje de Beth no les alcanzó, decidieron matar sin razón alguna a Carl, el hijo de Rick, dejando así al show sin el sucesor natural de la historia.


-Morgan se vuelve un pacifista que ya no desea matar, como Kenshin Himura, pero con un bastón de madera en lugar de la espada de filo invertido. Su cambio de actitud sucede sin razón válida que lo justifique. Y es insufrible cada vez que aparece hablando en pantalla.


-Michonne deja de ser una guerrera imparable con katana, para volverse una especie de ama de casa, a la que le encanta la jardinería.


-Eugene, luego de ver cómo Negan asesinó a golpes de bate a sus amigos, en el primer episodio de la temporada, decide trabajar para él como si nada. Hasta se viste de color negro para que sepamos que “se volvió malo”.


-Maggie Greene, ahora viuda de Glenn, ocupa el tiempo dando órdenes de mala manera a todo el que vea cerca. Solo le faltó marchar con el puño cerrado en alto, o teñirse el cabello de colores.


-Los intentos de los protagonistas por matar a Negan son tan infantiles y rebuscados que recuerdan a la caricatura “El Coyote y el Correcaminos”.


-Pusieron en pantalla un tigre hecho en CGI barato, que parece una cinemática salida de Play Station 1, y hasta entiende órdenes como si fuera un humano. Su dueño es una especie de “rey” de otra comunidad vecina. El tipo luce como Lenny Kravitz, pero con barba y sin guitarra. Y es tan útil para la trama como escribir un guion con el ordenador apagado.

 

-Carol, que siempre fue uno de los mejores personajes del show, mostrándose en ocasiones más dura y fría que el propio Rick, se retira a vivir tranquila a una casita en las afueras del reino de Lenny Kravitz. De vez en cuando, él le lleva comida, y charlan sobre el clima sentados como dos viejos.


Eso fue lo que entregaron al público entre la séptima y octava temporada. Dios bendiga a los afortunados que para entonces habían abandonado el show. Aún en la actualidad, después de tantos años, es incomprensible lo que ocurrió con “The Walking Dead”. El daño estaba hecho, siendo las temporadas que marcaron una sangría de audiencia nunca antes vista en la televisión. Episodio tras episodio, no hacían más que conseguir números cada vez más bajos. Lo único bueno de todo este desastre fue la renuncia de Scott Gimple como responsable del show. 

 

 

The_Walking_Dead_Seasons_7_&_8_AMC

Un ejemplo de esas temporadas: Pusieron una fotografía detrás de los protagonistas, para fingir que era el interior de una casa. 


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Otro ejemplo: El ciervo hecho en un CGI tan barato que parece obra de Marvel Studios.


Negan_pocket_cell_phone

El actor en su rol de Negan, pero con el móvil en el bolsillo. Y así quedó la escena. ¿Para qué refilmar?

 

La novena temporada inició con Angela Kang como nueva productora de la serie. Y no lo tuvo nada sencillo. Para empezar, debía de elevar los índices de audiencia perdidos. Pero incluso ella sabía que se trataba de una tarea imposible. El anuncio de que Andrew Lincoln se alejaba de la serie lo dejó muy claro. Angela Kang se vio ante la tarea de continuar “The Walking Dead” sin el personaje de Rick Grimes. Al menos consiguió que el actor se quedara hasta la mitad de la temporada, para darle a Rick una despedida a la altura de su importancia. Y vaya despedida que tuvo… en uno de los peores episodios de la serie. Siguiendo el legado de Scott Gimple, los guionistas decidieron insultar a la audiencia de nueva cuenta, con una historia digna de cualquier otra novela turca que les venga a la mente. Fue el clavo final en el ataúd de un show arruinado por completo. Los pocos que llegaron hasta ese punto, lo hicieron para ver la despedida del personaje de Rick. Se arrepintieron tan solo encender la televisión al ver:


-Un episodio mal filmado de inicio a fin.


-Actuaciones de pena ajena.


-Un drama forzado con Rick agonizando por una hemorragia.


-Escenas tan lentas como ver caer la miel de un tarro.


-Al igual que hicieron con Glenn, al inicio de la temporada seis, mintieron con la muerte de Rick en una explosión donde él se sacrifica, solo para salvarlo minutos después en una escena post-créditos que nadie pidió. Aparece gente en un helicóptero y se lo llevan... porque sí.

 

 

Rick_Grimes_season_9

Rick Grimes sacrificándose de forma épica en la novena temporada.


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Michonne llorando como Thalía en "María la del Barrio" en el mismo episodio.


Rick_season_9_episode

Más CGI horrendo para despedir a Rick por todo lo alto.


Luego de hacer llorar al propio Michael Landon con el episodio despedida de Rick, “The Walking Dead” continuó perdiendo audiencia en la segunda mitad de la novena temporada, y a un ritmo de locura. La tendencia se aceleró durante la décima temporada, que contó con solo un episodio bueno, siendo el de final de temporada, titulado “Here´s Negan”, donde puede verse por primera vez a la versión humana del bate “Lucille”. El episodio muestra los altibajos en la relación de Negan Smith y su esposa Lucille en una vida previa a la infección zombie. Cuando el apocalipsis llega a sus vidas, y ella enferma de cáncer, el mundo de Negan se hace pedazos. Las escenas juntos son una delicia gracias al trabajo frente a cámaras entre Jeffrey Dean Morgan y Hilarie Burton. La actriz, además de ser su esposa en la vida real, está acostumbrada a dejar una marca en la televisión. Ella era la razón por la que todos veíamos el show “One Tree Hill” tantos años atrás. Cuando abandonó la serie, allá por el año 2009, también lo hizo la mayoría de la audiencia. Y “One Tree Hill” se fue al demonio. Es cierto que “Here´s Negan” es un buen episodio que llegó demasiado tarde. Debió de haber sido incluido en la séptima temporada, para poder funcionar de forma correcta con el público. 

 

Lucille_The_Walking_Dead_S10

Lucille Smith 

 

Negan_and_Lucille_Season_10

La relación entre Negan y Lucille se muestra a medida que avanza la enfermedad. Ella comienza a usar pelucas de colores para afrontar lo inevitable. No es un episodio para cualquiera.  

  

Here´s_Negan_Season_10

Jeffrey Dean Morgan y Hilarie Burton, dando una clase de actuación, para un show que no lo merecía en absoluto a esas alturas.

 

Here´s_Negan_Season_ten

 Cuando Lucille se suicida, Negan Smith se viste con la cazadora de cuero negro, incendia la casa, y envuelve en alambre de púas su bate de madera. 

 

La temporada 11 es el fin del camino para un show que ya nadie veía. En su momento de mayor éxito, es decir entre las temporadas 4 y 5, “The Walking Dead” arrastraba en cada episodio de estreno casi diecisiete millones de espectadores. Para la temporada 11 apenas llegaban a un millón de personas por episodio. Toda una caída en desgracia para un producto que el mundo entero solía amar. Los responsables de la cadena televisiva AMC lograron arruinar lo que tenían entre manos, tomando por estúpido al público, en lo que significó cavar su propia tumba. ¿Qué tan malas son las temporadas 10 y 11? Pues pusieron a Judith, la hija de diez años de Rick como una de las protagonistas principales. La niña usa una espada Kodachi japonesa en reemplazo de la katana de Michonne. También utiliza el arma de su padre: La Colt Phyton de calibre .357 de Rick Grimes, que pesa más de un kilogramo, y tiene un retroceso de disparo que a ella no le molesta. A eso hay que sumar una inclusión forzada o diversidad sin límites que se adueñó de los episodios de la “narración circular”, con historias para todos los géneros, discapacidades y razas del planeta. 

 

 

Judith_Grimes_TWD

También usa el sombrero de Carl. Solo le faltó el parche de ojo del Gobernador.


Judith_Grimes_Season_11_TWD

Judith Grimes, asesinando a balazos el sentido común.

 

Entonces llegó el episodio final de la serie. Yo había abandonado el barco a mitad de la novena temporada junto con Rick Grimes, ahorrándome el insulto más descarado que recibieron los pocos que aún seguían la historia. El episodio final de “The Walking Dead” ni siquiera es un final como tal. Angela Kang lo utilizó para promocionar nuevos proyectos derivados del show principal. Es decir, que la historia no terminó. Los pocos fans que aún tenían ahora se verían obligados a mirar otras series con los mismos personajes, pero adivinen qué: Haciendo cosas diferentes… en lugares diferentes. ¿Les suena de algo? Si les suena es porque todos los shows en esta lista son producidos por Scott Gimple.


-Un show con Daryl Dixon en París, Francia: “The Walking Dead: Daryl Dixon” Se la jugaron con el título, eh. ¿Cómo llegó a Europa sin aviones comerciales o barcos de línea transatlánticos?


-Otra serie con Maggie y Negan... juntos ¿? en New York: “The Walking Dead: Dead City”, que parece un título escogido por un tartamudo.


-Un show con Rick y Michonne en otra ciudad de América: “The Walking Dead: The Ones Who Live”


-Otro con Carol de protagonista: “The Walking Dead: Book of Carol”


Scott Gimple sí que es un maestro para escoger los títulos. Si tuviera que hacer el remake de “Jaws” estoy seguro que lo llamaría: “El tiburón y el barquito”. 

 

 

Daryl_Dixon_show

Una...


TWD_Dead_City_show

Absoluta...


TWD_The_Ones_Who_Live_show

 Estafa.

 

The Walking Dead” y su público masivo se merecían algo mejor de lo que acabó siendo. A partir de la salida del genial Glen Mazzara, los productores que le siguieron arruinaron todo lo que tenían al alcance de la mano. Desde personajes principales hasta arcos argumentales, pasando por un mundo destruido que se veía alucinante, pero que terminó luciendo como una versión zombie de una novela de Televisa. Ellos son los únicos culpables de todo el desastre que llegó con la segunda mitad de la cuarta temporada. Fue el punto que marcó una caída de la que no pudieron recuperarse jamás. Y aún así continuaron alargando el cuento. O puede que nosotros como audiencia fuéramos demasiado ciegos debido al cariño que le teníamos a la historia, con los ojos pegados a la pantalla por inercia pura; avanzando lento a la par de episodios sin sentido alguno, como muertos que caminan. 

 

 

The_Governor_Chibi

 El Gobernador


 

 

 

 

 

Fuentes Consultables:

 

Imdb.com 

 

 

 

 

 

 

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