Historias de Hollywood: David Strickland “El Titanic de Hollywood”
El RMS Titanic fue una joya de la ingeniería naval. Contaba con lo último en tecnología y, por dentro, era un palacio flotante como nunca antes fuese visto. Cuando dejó atrás el puerto de Southampton, durante su viaje inaugural, todos deseaban ir a bordo de una embarcación cuyo futuro no podría ser más prometedor. Cuatro días más tarde, el catorce de abril de 1912, la nave insignia de la White Star Line se hundía en el Atlántico Norte, dejando al mundo entero atónito. El veintidós de marzo de 1999, David Strickland se encontraba en lo más alto del cielo de Hollywood. Inmerso en una relación de pareja con una de las actrices más bellas de la industria, dueño de su primer protagónico importante en el cine y, siendo parte fija del elenco, de una de las sitcoms más vistas de los últimos años (cuya protagonista era además su íntima amiga), decidió beber en soledad una caja de cerveza barata, sentado en la habitación de un motel de mala muerte ubicado en Las Vegas, Estado de Nevada. Los directivos de la White Star Line se llevaron las manos a la cabeza al ver que su barco desapareció bajo las aguas heladas. Lo mismo hicieron los responsables de los Estudios Warner Brothers cuando el teléfono sonó en sus oficinas de Los Ángeles.
David Strickland
David Strickland nació el catorce de octubre de 1969, en Long Island, Nueva York. Su familia se trasladó luego a New Jersey y, por último, a Los Ángeles, Estado de California. Allí, David se inclina por dedicarse a la actuación, donde se une a una compañía de teatro. Poco a poco recibe pequeños papeles, como los roles de un solo episodio en comedias de televisión como “Dave´s World” y la exitosa “Roseanne”, de Paramount Television, en el año de 1995. A eso debió de sumar la participación en el film para televisión “Mixed Nuts”, dirigido por Will Mackenzie en 1996. Y un corto papel en la serie de comedia familiar para televisión “Sister, Sister” producida por los Estudios Paramount.
Strickland: futuro prometedor.
"Sister, Sister" de la cadena ABC (1995). Primeros pasos de David y, también, de una joven Brittany Murphy.
La oportunidad de brillar llegaría junto a Paul Reiser y Helen Hunt, bajo el rol de Hollis Pavel, en la sitcom estrella de Sony Pictures, “Mad About You”. Lo haría durante seis capítulos brillantes entre 1995 y 1996. Entonces llegó el papel que le elevaría a la fama instantánea, y la subsecuente amistad con la actriz Brooke Shields. Era la época dorada para el talentoso actor, porque la guapa Tiffani Amber Thiessen (parte integral de “Saved by the bell” y “Beverly Hills 90210”), llegó a su vida para robarle el corazón. Desde fuera, como suele sucederle al observador casual, todo era sonrisas y éxito. Pero en silencio, David Strickland se ahogaba en drogas y en alcohol. El estado bipolar y la depresión clínica que le fue diagnosticada tampoco ayudó en la ecuación de su existencia. Donde los demás veían un ascenso meteórico; él solo contemplaba un camino cuesta abajo.
Tiffani Amber Thiessen & David Strickland: pareja de ensueño.
En el set de filmación de "Mad About You" (1996), junto a Paul Reiser.
Shields & Strickland: amistad inmediata.
La comedia de televisión producida por Warner Brothers y transmitida por la cadena NBC “Suddenly Susan”, sobre una fotógrafa que debe de ajustarse a su nueva vida de soltera, fue un éxito rotundo e inmediato. Bajo el rol de Todd Stities, un reportero de la escena rock, Strickland consiguió el reconocimiento del público americano. El elenco contaba con talentos como Brooke Shields, Judd Nelson, Nestor Carbonell, Kathy Griffin y Barbara Barrie. El show, creado por Clyde Phillips, grabado en formato multi-cámara, estrenó el diecinueve de septiembre de 1996. David participó durante setenta y un episodios entre 1996 y 1999.
Promocional de "Suddenly Susan" (1996-1999), una maravilla de los noventa.
El elenco de estrellas de "Suddenly Susan" en el set.
Junto a Brooke Shields en el set de "Suddenly Susan" (NBC).
El elenco completo en otro promocional.
En el año de 1998, David protagonizó el film “Delivered”, dirigido por Guy Ferland, sobre un repartidor de pizza que se convierte en testigo de un asesinato. Fue en octubre de ese año que el actor es arrestado por posesión de cocaína. Al declararse culpable de los cargos, fue sentenciado a tres años en suspenso, y enviado a una rehabilitación. La fecha dispuesta desde entonces para la revisión de su caso en la corte, de manera presencial por supuesto, tiene mucho más significado de lo imaginado en un principio: veintidós de marzo de 1999.
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Poster de "Delivered" (1998).
En escena de "Suddenly Susan" como Todd Stities.
El film de Dreamworks Pictures “Forces of Nature”, dirigido por Bronwen Hughes, protagonizado por Sandra Bullock, Ben Affleck y Maura Tierney, fue el primer papel importante en la industria del cine para la carrera de David Strickland. Su rol como Steve, el ex novio de Sandra Bullock en la cinta, no hizo más que catapultar su fama y renombre. Un día antes del estreno, el veinte de marzo, el actor abandonó su hogar ubicado en el número 2910 de una transitada calle en la zona de Santa Mónica. Sin hablar con nadie de su entorno, se dirigió a la ciudad de Las Vegas.
Poster del film "Forces of Nature" (1999).
En escena de "Forces of Nature", junto a Maura Tierney.
El éxito de “Forces of Nature”, que estrenó el veintiuno de marzo con una recaudación de trece millones y medio de dólares, convirtió a la comedia romántica en el film más visto de ese fin de semana en todos los Estados Unidos de América. El lugar del joven actor entre la elite de Hollywood estaba ya asegurado. En la madrugada del veintidós de marzo, luego de un día entero de beber sin parar entre visitas a clubes nocturnos que ofrecían desnudos, sentado en la ruinosa soledad de un motel casi marginal de Las Vegas, sin documentos de identificación en su poder (ni tampoco boletos de avión para regresar a California), David Strickland bebió las cervezas que acababa de comprar para dejar las latas vacías sobre la mesa de dormir. Luego quitó las sábanas de la cama, y las sujetó a la viga de acero sobre su cabeza, que cruzaba el techo de una habitación deprimente de cincuenta dólares la noche. Las comodidades, si podían llamarse de esa forma, contaban con una televisión vieja que ofrecía películas para adultos.
La habitación número 20 fue su destino.
Llegó el veintidós de marzo y la audiencia en la corte de Los Ángeles. Al no presentarse, una preocupada Brooke Shields dio el paso de contratar a un detective privado. La misión que le asignó fue la de dar con el paradero de su amigo desaparecido. El detective hizo bien su trabajo. El resto..., fue triste historia de Hollywood. La producción a cargo de “Suddenly Susan” se decantó por realizar un episodio especial donde se abordaría la muerte del querido personaje llamado Todd Stities. Así lo hicieron, con el resto del elenco reunido para recordar las buenas obras de su amigo.
Brooke Shields: amiga en las buenas y en las malas.
Interior del nefasto Oasis Motel. 1731, Las Vegas Boulevard.
Mientras el público americano lo veía dar un salto hacia arriba ese fin de semana en las salas de cine repletas; David Strickland decidió dar uno hacia abajo, al patear la única silla de la que disponía como sustento en la pequeña habitación número veinte. Lo que podría ser su carrera de no haberlo hecho…, nunca lo sabremos. Quienes hayan sido observadores durante la lectura de esta entrada, habrán notado algo en cada fotografía aquí presente: el contraste entre el semblante de David y los demás retratados con él. Yo diría que algunas cosas, sin importar cuánto se intenten ocultar, se notan. Por fortuna quedan los setenta episodios de una de las sitcoms más vistas de los años noventa. Y un film taquillero que, de haberse tomado algo de tiempo para reflexionar, habría notado como señal de que el esfuerzo de su parte valía la pena. En ocasiones se tarda y existen pozos en el camino, pero lo vale.
David Strickland
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